Catrina Mitens
Gato Catrina Mitens es el nombre de esta pieza de yeso (B1764). Esta Catrina personifica un elegante gato de cuello largo, donde hemos aplicado una variedad de técnicas artísticas para realzar su belleza. Utilizamos el puntillismo para agregar texturas detalladas, la simetría para garantizar una armonía visual equilibrada y el delineado con liner para resaltar los contornos con precisión. Cada técnica se fusiona con gracia para dar vida a esta pieza única, que se distingue por su meticulosa atención al detalle y su expresión cautivadora.
Cada una de nuestras piezas está meticulosamente confeccionada con yeso blanco macizo de la más alta calidad, asegurando una terminación impecable y detalles sorprendentes. En nuestro taller, nos dedicamos a elaborar nuestros propios moldes y diseños exclusivos, lo que garantiza que cada pieza que producimos sea verdaderamente única y distinguida. Nos enorgullece ofrecer objetos que no solo son visualmente impactantes, sino también reflejo de nuestro compromiso con la artesanía de excelencia.
Un trabajo 100% artesanal que convierte cada calavera en única!
Pintada, decorada y laqueada totalmente a mano, además de ser trabajada individualmente. Los diseños en la gran mayoría son propios, salvo aquellos que son temáticos o personalizados bajo pedido. Los dibujos son realizados a mano alzada sobre cualquier superficie y para ello utilizamos una amplia variedad de pinturas, herramientas de relieve, pinceles, plumines, aerógrafo, grafito y acuarelas. Para la elaboración de nuestras artesanías utilizamos materiales biodegradables, como pinturas, lacas y barnices ecológicos.
Catrina, un poco de historia…
en 1949 un periódico comenzó a implementar epitafios alegóricos, también conocidos como calavera literarias, el objetico de esto fue rendir honor a un personaje con un comportamiento hipócrita, rodeado de riquezas y el poder que brinda. Estos epitafios (calaveras literarias) se acompañaban de ilustraciones de esqueletos muy elegantemente vestidos y con expresiones alegres inusitadamente.
El culto a las calaveras en México no solo responde a un sentimiento religioso (el cual existió siempre) sino que la imagen y el culto se hace popular en el gobierno de Benito Juáez. Las clases altas de México querían parangonar a las clases elite de Europa.
En 1960 basado en un culto anterior, nace la figura de Santa Muerte, o San Muerte. Se caracteriza por ser una virgen cristiana, siendo su rostro una calavera. Su culto era conocido por petitorios de salud, amor o diseño. La veneran generalmente personas que arriesgan su vida habitualmente.
Su culto y adoración se unió a la imagen de catrina teniendo una gran popularidad. Se dice que el origen del culto mexicano a la muerte viene de la Dama de la muerte, conocida también por la diosa Mictecacíhuatl.
«Regalar una calavera de azúcar es, según ellos, recordar ye la muerte es tan dulce como la vida».
La calavera conocida también como calaca, catrina o skull, es la representación del cráneo humano. En México la catrina es uno de los icono representativos de la cultura mexicana, el origen de este personaje se da ante el descontento del pueblo mexicano con las clases privilegiadas
